Arte: Seducción Fatal en el MNBA
"La seducción fatal. Imaginarios eróticos del siglo XIX", curada por Laura Malosetti Costa,
se inauguró en el Museo Nacional de Bellas Artes (MNBA).
Con el apoyo de la AAMNBA, se exhiben 65 obras de pintura y escultura, además de grabados, fotografÃas e impresos.
La propuesta de Laura Malosetti Costa, curadora de "La seducción fatal. Imaginarios eróticos del siglo XIX" en el MNBA relata en forma historicista los cambios sociales de fines del siglo XIX hasta el estallido de la Primera Guerra Mundial.
El tema es la mujer y el imaginario erótico en ese perÃodo, cuyos tópicos fueron reformulados y transformados para el consumo burgués.
Está integrada en un 90 por ciento por obras que pertenecen a la colección del Museo y está organizada en núcleos temáticos: Erotismo y violencia: el rapto; Prisioneras y cautivas; Desnudo, voyeurismo y transgresión; Seductoras fatales y Musas modernas.
Prisioneras y cautivas (que pasan de ser las cautivas europeas a ser las cautivas del malón en América, y su imaginario adaptado a los temas locales), el auge orientalista que fantasea con la idea de un harem, con muchas mujeres en cautiverio, también aparece en la obra de autores argentinos, como Severo Rodriguez Etchart.
Este imaginario erótico del siglo XIX profundamente incorrecto para la sociedad actual, en aquel momento tuvo una activa participación femenina.
No es casual que la obra elegida como imagen de la muestra, sea la de Juana Romani, quien era una artista italiana que se ganaba la vida haciendo de modelo para pintores orientalistas en ParÃs, pero como ella también era pintora, se hizo un inquietante autorretrato en el que ella representa su propio desnudo.
Voyeurismo y transgresión
Los desnudos secretos, son obras que no se exponÃan y solo se apreciaban en forma privada, como los retratos a criadas de Prilidiano Pueyrredón, o el emblemático "Despertar de la criada" de SÃvori.
Desnudo
Una cantidad de obra de formato pequeño, corresponde a los desnudos de consumo burgués, mercancÃa erótica que se vendÃa en los bazares y asà los artistas se ganaban el sustento.
Seductoras fatales y musas modernas, tienen que ver con el nuevo lugar de la mujer en la sociedad. La femme fatal está presente en forma casi obsesiva en todas las manifestaciones culturales del fin de siglo.
El imaginario representa el miedo que produjo en los varones esta mujer nueva, poderosa, que se convertÃa en bailarina, en diva de cine, tema de novelas y obras de teatro.
Muchas de estas mujeres fatales tomaron el nombre de heroÃnas, porque este también es un tópico tradicional y uno de los primeros: la mujer que desestabiliza el orden por querer saber.
La curiosidad de Eva cuando muerde la manzana, que no es otra cosa que la voluntad de saber discernir entre el bien y el mal, al igual que la voluntad de Pandora de saber qué esconde su caja.
Muchos mitos tienen que ver con la mujer que aterroriza a los hombres, pero sobre todo, la mujer que quiere ocupar un lugar que supuestamente no le corresponde.
Algunos son retratos de actrices encarnando el personaje de heroÃna de alguna obra que representaban. Por ejemplo, la emperatriz Theodora, es un retrato de Sarah Bernhardt caracterizada para la obra de teatro.
El MNBA convocó a 20 escritores para que redactaran los epÃgrafes de las obras. Algunos de estos textos forman parte del catálogo.
En una sala aparte, se proyectan las primeras pelÃculas eróticas argentinas que son propiedad del Museo del Cine, junto a un rico material fotográfico y folletos de invitación a citas con mujeres, que eran de consumo general en el ambiente de hombres solos inmigrantes a principio de siglo.
Una muestra que permite ver obra muy interesante que rara vez se expone.
Hasta el 15 de marzo de 2015.
Pabellón de exposiciones temporarias
MNBA
Avenida del Libertador 1473.